Prueba de actividad protectora / Prueba de desafío
La eficacia de la conservación de un producto cosmético en desarrollo debe evaluarse empíricamente para garantizar la estabilidad microbiana y la protección durante el almacenamiento y uso. Esto se puede hacer con una prueba de eficacia protectora. Este último es obligatorio para todos los productos cosméticos que puedan deteriorarse o presentar riesgo de infección para el consumidor en condiciones normales de almacenamiento y uso.
La prueba de eficacia conservante o “Challenge Test” se basa en la evaluación de la reducción de la contaminación por contaminación artificial del producto terminado y posteriormente a niveles que cumplan con los límites microbianos establecidos para las Categorías 1 y 2.
• Pseudomonas aeruginosa (ATCC 9027)
• Staphylococcus aureus (ATCC 6538)
• Escherichia coli (ATCC 8739)
• Cándida albicans (ATCC 10231)
• Aspergillus brasiliensis (ATCC 16404)
Las actividades protectoras de los productos cosméticos se prueban utilizando los microorganismos mencionados anteriormente. Al determinar la actividad microbiana de los conservantes o cualquier otro compuesto en los cosméticos terminados, se aclara si el producto es seguro para los usuarios.
Puede solicitarnos la "Prueba de eficacia protectora / Prueba de desafío" para productos cosméticos.